Manual para elegir un Candidato


De cara a las Elecciones Presidenciales del año 2012, se ha generado una gran cantidad de información referida, por un lado, a la Candidatura de nuestro actual Presidente, y por otro, a la posibilidad de que la oposición presente un candidato único. Son muchas las razones, por todos conocidas, que inspiran esa propuesta de candidato único, pero es público y notorio el hecho de que, con mucha desesperación por parte de algunos de nosotros, vemos cómo pasa el tiempo sin que se concrete dicha propuesta. Muchos son los números, razones, propuestas, candidatos incluso que han salido al ruedo, pero siempre ha estado presente el hecho de que no se logra ver la Unidad que debería existir en la Mesa homónima, y peor aún, más que una gestión que conduzca HACIA esa meta, lo que se nota es una pugna, una lucha, una guerra, de la cual ciertamente va a haber un candidato único, pero más que el mejor, será el que quede. Por ello, me atrevo a desarrollar a continuación algunos puntos que permitan aportar algunas ideas de lo que esperamos algunos del que será nuestro candidato (y eventual Presidente), con miras a poder ir, convencidos, a votar por esa opción, con la esperanza real y cierta de lograr un cambio en nuestro destino, en lugar de ir a votar por «el menos malo», o peor aún, a Botar simplemente.
Un hecho que vengo notando desde hace mucho tiempo, es que realmente la Oposición se presenta como muy «acomodaticia» (puede el lector ver lo que escribí al respecto hace algún tiempo atrás). Hay ejemplos notables en cuanto a la lucha social se refiere, y con los nuevos miembros de la Asamblea, pues  realmente tenemos la gran esperanza de contar con verdaderos REPRESENTANTES en dicha instancia, que realmente lleven lo que pensamos y sentimos el resto de los venezolanos. Pero a la fecha, y obviamente en mi humilde opinión, no hay nadie que se muestre absoluta y totalmente frontal a los planes y acciones del Gobierno. Por ejemplo, cuántas demandas hay contra gestiones de miembros del PSUV? Y si las hay, por qué no son anunciadas y recordadas a diario? Si las hay, por qué no se usan como ejemplo de la parcialidad de la justicia venezolana? Apenas en estos días pude leer en alguna parte, que Diosdado Cabello se declaraba un «perseguido político» por Capriles Radonski (hágame usted el favor, Diputado Cabello), pero no hay nada formal, al menos no es algo que se muestre públicamente. Donde están las denuncias claras y concisas contra la administración de Juan Barreto? O contra la de Rangel Avalos? En qué estado están, si es que existen? Tengo mucho tiempo preguntándome eso, porque me llama la atención el hecho de que se presenta muy sutil la denuncia y el seguimiento a esos y todos los casos (que deberían sobrar en estos 12 años, tanto de un lado como del otro) de corrupción, como dicen por ahí, «caiga quien caiga». En este sentido, el candidato debería ser alguien con la decisión de demostrar que no tapa a nadie, por el temor de ser mañana el perseguido de hoy. Y para ayudar a los candidatos potenciales, tenemos un caso reciente que puede ser una muestra muy buena de lo que indico: La donación de los US$10.000.000 a la Universidad Uruguaya (que realmente no me interesa el nombre). Todo el mundo ha dicho que es malo, malísimo haber hecho eso. Han sacado las cuentas de lo que se podría hacer en el país con ese dinero, pero me pregunto yo: y la formalidad? Donde está el acta de denuncia de ese hecho, no sé, en la Corte de la Haya? Los Diputados, ya deberían estar llamando al Presidente a dar explicaciones al respecto. Dónde estaba presupuestado que se podía usar ese dinero así? Si no es malversación de fondos. Al menos Traición a la Patria debería poder aplicar! Pero no!, solo ha habido consternación, tristeza, enfado, y pareciera que todos estamos convencidísimos de que se pagará por esto y todo lo demás, en la Corte Celestial…
Como se ve en la caricatura de Fernando Pinilla (a quien le agradezco mucho el permitirme utilizarla), hay, de muchos problemas, algunos que son realmente importantes de resolver para los venezolanos. Todos vemos como se genera información acerca de los hechos QUE SUCEDEN (y lo resalto porque es importante ver que siempre es referido al pasado), apoyado por estadísticas, números fatídicos, hechos trágicos (como los de la energía eléctrica), donde se indica siempre el por qué se ha llegado a dichas situaciones. Todos los «candidateables» se presentan con expertas opiniones sobre la culpa del Gobierno en cada uno de esos álgidos problemas. Pero, hasta ahora y, repito, en mi humilde opinión, no he visto la primera propuesta, ni buena ni mala, ni atrevida ni tímida, sobre cómo se van a solucionar. Se habla de lo equivocado de las decisiones del Gobierno, de lo que no ha hecho y que ha conllevado a la situación, de las inversiones en las que ha malversado los fondos que debió invertir en la solución (siempre informalmente), pero no se indica la manera correcta como se debió, y en el caso de los candidateables, como SE VA a proceder para no solo solventar los problemas, sino eliminarlos de por vida de nuestra realidad. Así, el candidato debería ser alguien que presente propuestas claras y concisas no solo de cómo va a atender y solucionar los mayores problemas que nos aquejan actualmente, sino de cómo va a llevar este barco que es Venezuela a buen puerto. Y debe quedar claro que estas propuestas no pueden ser ni en arameo, o lenguajes técnicos destinados solo a los entendidos, además de que deben estar consideradas en el marco de la realidad de país que tenemos. Un ejemplo de propuesta puede ser el siguiente: Un Candidato Presidencial «tradicional», seguramente diría: «el problema de la delincuencia lo atacaremos convocando a los mas óptimos y preparados ciudadanos, a que aporten, a través de métodos cuantitativos y cualitativos, aquellas soluciones que tiendan a aportar, en forma asintótica y sin parangón en los anales de la historia, las soluciones más adecuadas y que conlleven a lograr la mayor suma de felicidad posible, en el marco de la situación pluripatrimonial y multipolar que vive el planeta tierra en estos momentos«. NO! no es eso lo que necesitamos. Necesitamos que nos digan, mirandonos a los ojos: «la partida 10.2.3.4.99.82, que actualmente se destina a la reproducción de la espada de Bolívar, y que tiene un monto anual de Bs.F. XXXXXXXXXXXX,99, se destinará a asignarle a los actuales miembros de las policías estatales y municipales un aumento del XX%, así como a establecer fondos de pensiones y de financiamiento de viviendas, con lo cual esperamos elevar la moral del personal en un YY%, y eso debería significar que en ZZ meses, deberíamos ver una disminución del TT% en las muertes de los fines de semana en Caracas«. Así, para cada problema, sería bueno escuchar propuestas y planes cuantificables y medibles en el tiempo. Y, mucho más importante aún, el compromiso de que de no suceder así, se determinará la razón, y se solucionará.
Recientemente se ha visto como, en forma bien valiente, han salido a protestar conciudadanos que se las están jugando en función de los ideales y necesidades que consideran importantes. Así, hemos visto como en repetidas oportunidades, los estudiantes universitarios (que por cierto estoy pendiente de escribir al respecto) han decidido jugarse la vida en pro del país, así como más recientemente y aún en lucha, los enfermeros y enfermeras del país han arrancado una protesta. Pero, en mi opinión no han recibido el apoyo que merecen, y más de aquellos que pretenden proponerse como candidatos a la Presidencia de nuestro país. Aparte de una muy baja y conveniente cobertura por parte de los medios de comunicación que debieron estar, así como hizo DirecTV con aquel programa que se llamó «Protagonistas de Novela», las 24 horas del día presentes, no se vió una presencia de los candidateables con esos compatriotas, sino por el contrario, cuando medio iba alguien que resultara de interés periodístico, es que se pasaba a una transmisión en vivo. No pediría que se pusieran en huelga de hambre con ellos (aunque sería lo ideal, para ejercer presión), pero si que se pusieran de su lado, abiertamente, sin tapujos, y se dedicaran a defender no solo su causa, sino todas aquellas que afecten a cualquier venezolano. El Candidato debería ser alguien que no piense en primera persona, que no escoja las causas que más le convienen, o peor aún, que las deje avanzar hasta que sea conveniente apoyarlas, a cuenta de la pérdida incluso de vidas humanas. Debe más bien ser alguien que prevea los problemas, y los atienda con tal eficiencia que no lleguen a las vergonzosas situaciones que lamentablemente se han hecho tan comunes en nuestro diario quehacer.

Como se puede concluir, no es mucho lo que pido para que haya un Candidato que me convenza de votar por el. Obviamente, las elecciones se ganan con votos (sean orgánicos o inorgánicos, si me entienden), pero es muy egoísta tratar el problema que enfrentamos los venezolanos asumiendo que la solución es sólo electoral. No sólo debe ganar quien tenga más votos. En esa complicada ecuación, se deben considerar otras variables, que realmente aseguren no solo que gane el candidato de la oposición, sino que realmente sea la opción que inicie ese lento proceso de recuperación del país. Precisamente, el tema de una opción única puede representar que se pueda postular la mejor opción, y si no es la que cuenta con más votos propios, los demás se los aporten con miras a lograr el resultado esperado. Es un ejercicio de desprendimiento, de voluntad popular, de DEMOCRACIA. Por el contrario, si siguen en esa vía de medirse sólo por los votos, no sólo llegará el día de las elecciones y no habrá salido humo blanco, sino que ganará quien hasta ahora ha demostrado tener la mayoría de votos, electoralmente hablando.

Agradezco nuevamente a Fernando Pinilla (@FMPinilla) por permitirme usar su caricatura.