Según el Diccionario de la lengua española @ 2005 Espasa-Calpe, acomodaticio se define como:
1. adj. acomodadizo.
Según el mismo diccionario, acomodadizo es:
1. adj. Que se adviene a todo o se conforma fácilmente: talante acomodadizo.
Hace mucho tiempo, en plena crisis petrolera, luego de 30 horas de cola, llegamos a unos 4 kilómetros de la bomba donde nos iban a surtir de gasolina. Fueron pasando los carros delante de mi, hasta que cuando me faltaba solo un carro para pasar, detuvieron la cola. La razón: La gasolina que quedaba se la iban a dar al transporte público. Esto, por supuesto, hizo que quienes estabamos en la cola, enfureciéramos. De una urbanización de al lado de la cola, salieron unos «vecinos», que comenzaron a convocar a la protesta, que no podiamos dejar eso así. Por supuesto, no hizo falta mucho empeño para que un grupo grande de personas, luego de 30 horas de cola, decidieran escuchar los «sabios» consejos. De la nada salieron cauchos, que de inmediato comenzaron a arder en señal de protesta. De parte de los de la cola, se realizaron elecciones inmediatas, para la conformación de un comité de conflicto, compuesto por presidente, vicepresidente, secretario, vocales, etc… Comenzó la protesta. Solo unos metros separaban la protesta (y mi carro estaba de segundo en la cola) de las fuerzas de seguridad del estado.Los cauchos ardían (seguían saliendo, de la misma nada). En vista de lo caldeado del ambiente, llegaron mas fuerzas a aplacar los ímpetus. Se formó un toma-y-dame, donde los protestantes se fueron encima de la policía, y esta última, como es de esperarse, respondió con los garrotes. Como resultado, una de las personas de la urbanización resultó presa. Más vale que no. Aparte del problema original de la gasolina y las 30 horas de espera, ahora se reclamaba la devolución del preso. El ahínco por lo que se convirtió en «nuestro preso» se volvió tal, que ya inclusive se cantaba, a coro, «queremos nuestro preso» – «queremos nuestro preso», pero el preso nada que lo regresaban. Siguieron caldeandose los ánimos, hasta que pasado cierto tiempo, llegó un enviado del secretario general de gobierno, quien en su nombre solicitaba una reunión con unos representantes de los manifestantes. De inmediato, los recién electos representantes del comité de conflicto se organizaron, asistiendo el presidente y el vicepresidente, quienes estaban claros que el mensaje era que no nos iríamos hasta que «nos echaran la gasolina a la cual teníamos derecho». Cual película, se abrió la barricada para el paso del carro solitario con los dos valientes a bordo. Pasaron los minutos, nadie hablaba, hasta que a lo lejos, en una curva, se vió que venía un carro, el carro con los mensajeros. Estos llegaron y, luego de acomodarse en dirección a la bomba, explicaron que nos dejarían colocar 10 litros de gasolina, con lo cual, quienes estaban en «cero», podrían llegar a otra bomba, donde tendríamos prioridad, al otro lado de la ciudad. No transcurrieron ni siquiera segundos, para que todos los protestantes estuvieran en su carro, con la mano en la llave, esperando la partida. Recuerdo claramente como, uno de los vecinos de la urbanización, compañero del hasta ese momento «nuestro preso», gritaba, repetida e insistentemente: «PERO, Y EL PRESO???» Y mientras nos daban paso, se veía como bajaban los carros a toda máquina, y quienes lo escuchaban gritando clemencia por el apoyo para con «nuestro» preso, le gritaban en respuesta: «que preso del carajo! que se joda ese guebón!!!», mientras iban a poner sus 10 litros de gasolina luego de 30 horas de cola. Esto, es ser ACOMODATICIO.
Desde hace muchos años, es tradicional que se sufran las consecuencias de las protestas estudiantiles. Entre lunes y jueves, las protestas son profundas, violentas, justificadas, necesarias para quienes en ellas participan, por lo cual se observa como se da rienda suelta a las mas bajas pasiones y acciones. Pero, dadas las circunstancias, por lo general, las autoridades universitarias, ante una protesta que lleva 4 días continuos, decide suspender las actividades, de manera que el viernes no hay actividades, y los examenes fijados, quedan suspendidos hasta al menos una semana luego del reinicio de las actividades. Independientemente del motivo original de la protesta, esta medida produce el mas profundo efecto, suspendiendose dichas protestas casi en forma inmediata, de manera que el dia viernes no se ve pero ni un alma en la calle protestando, repito, independientemente de lo necesaria o no que sea dicha protesta. Esto, es ser ACOMODATICIO.
Por lo general, uno siempre termina teniendo la oportunidad de quejarse y de expresar su opinión con respecto a la situación actual del país. Entre lo más típico de esas conversaciones, está el tema de la corrupción que nos rodea, y como es posible que los empleados publicos, especialmente quienes tienen cargos altos, se dedican a incumplir, sistemáticamente, con las leyes, reglas y normas existentes, todo en beneficio propio, traicionando la responsabilidad que tienen para con las personas que los ven como ejemplos a seguir. Nos quejamos de que son los que deberían dar el ejemplo, para que las cosas se acomoden, lo cual suena totalmente lógico. Pero luego, salimos con nuestros hijos, y ante un semáforo en cualquier calle, que está en rojo, aceleramos y «nos lo comemos», y cuando el niño o niña pregunta: papá (o mamá), te comiste el semáforo? eso no es incumplir la ley? les contestamos: «bueno, pero no había un fiscal cerca, así que no importa». Eso, es ser ACOMODATICIO.
Hoy cerraron las primeras emisoras de radio, por orden del gobierno. Técnicamente, les quitaron la concesión para el uso de una frecuencia específica del espectro electromagnético. Esto se traduce en que los equipos que estaban configurados para transmitir es dicha frecuencia, ya no son útiles, porque está prohibido, para los dueños de los equipos, dicha transmisión, por lo cual los equipos son algo inservible, inútil. Podrían reconfigurarse para otra frecuencia, pero se puede suponer, sin temor a equivocarse, que si se les quitó a los dueños de dichos equipos una concesión, por ningún motivo se les va a dar otra por el uso de una nueva frecuencia, por lo cual, sencillamente, se quedan fuera del negocio, y los equipos, con toda lógica (para quien no es dueño de los mismos), son decomisados, ya que no le son de utilidad, y reasignados a otro usuario (en el mejor de los casos). Globovisión, desde temprano, transmite la noticia. En cada emisora cerrada, ojos llorosos indican los sentimientos del momento. Salen periodistas, dueños de radios, indicando su malestar, su temor, su rabia… A mi me tocó salir hoy, y por supuesto, comencé a buscar en el radio del carro a ver quien seguia informando de la tenebrosa noticia, pero para mi sorpresa, NADIE LO ESTABA HACIENDO. Recorrí el dial dos o tres veces, y nada. Los programas de costumbre, LAS CUÑAS RESPECTIVAS, pero nadie se quejaba. Pensé: «estos si son solidarios. Mientras a los otros los cierran, estos tienen mucho pesar, pero ahí están! como si todo siguiera igual…». Esto, definitivamente, ES ACOMODATICIO!
Soy autocrítico en el sentido de que mucho de lo que nos sucede, es porque somos acomodaticios. Se me ocurría a mí, que en el caso de las radios, una tremenda forma de protesta sería que TODAS las emisoras del país apagaran sus señales, al menos por un día completo, para ver si el resto de la gente reacciona ante lo que está sucediendo, pero obviamente, y como siempre sucede, hay intereses que jamás dejarán que eso suceda. Igual pasaba en la Universidad, cuando tuve la oportunidad de pertenecer a la dirigencia del movimiento estudiantil, que las protestas siempre tenían un interés distinto al que suponían muchos de los que incluso protestaban (y hasta morían en el intento); y por supuesto, en el caso de la cola de la gasolina, si hubiésemos interpuesto el bienestar común, así como el sentido del mismo tipo, quizás al menos hubiésemos negociado el regreso del preso, quien solo Dios sabrá que habrá sido de el, además de lograr mas de los 10 litros de gasolina que nos echaron, sin contar de que, con toda seguridad, a nuestros mensajeros deben haberles llenado su tanque…
Solo en el momento en que dejemos de interponer los intereses particulares sobre los grupales, es que lograremos las metas comunes que podemos tener. Mientras dejemos de aplicar el «mal de muchos, alegría de tontos», quizás veamos una luz que nos oriente, cuando menos, a dejar esa pírrica alegría con la cual vivimos.
Me despido, por ahora, acomodaticiamente desde esta esquina donde escribo, mientras veo que solo globovisión parece interesado en informar sobre lo que sucede en este país. O es que quizás son solo inventos de Ravel, y nuestra realidad es la que se ve en el resto de los canales nacionales? Ante esta tranquilidad, seguiré investigando cual es el último matrimonio feliz, en la novela homónima, donde NADIE lo es! Y bueno, meteré mi Ipod para tener bastante música que escuchar en el carro…
¡Qué tragedia ésta, que estamos viviendo! ¡Qué pesadilla! ¿Cuándo despertaremos?