La realidad que nos rodea

Fernando J. Castellano Azócar

Mas veces de las debidas cae uno en la tentación de asumir que las cosas que suceden son parte de un plan macabro en nuestra contra, pero cuando me veo como muy afectado por ese pensamiento termino concluyendo que no es posible que tanta gente se haya organizado para unirse en un solo frente en mi contra porque definitivamente no soy tan importante (ni pretendo serlo). Pensando en éste tema de forma recurrente me encontré con una opción que puede responder a mis dudas, que es El Principio de Haulon (Haulon’s Razor).

El Principio de Haulon es un modelo mental que se resume en su forma original de la siguiente manera:

Never attribute to malice that which can be adequately explained by neglect

La versión traducida por mi es:

Nunca atribuyas a la maldad lo que se explica adecuadamente por la estupidez

Según algunos historiadores, la versión de Napoleón Bonaparte es:

Nunca atribuyas a la maldad lo que es explicado de forma adecuada por la incompetencia

Más allá dela estupidez o de la incompetencia lo que es cierto es que es muy poco probable que todo lo que sucede obedezca a un plan. Por supuesto que no hay que caer en ilusiones inocentes, pero tampoco se puede vivir perseguido por fantasmas. Por el contrario lo que recomiendo es seguir a Séneca cuando dijo:

Asóciate con gente que buscará que mejores. Da la bienvenida a aquellos a quien puedas hacer mejores. El proceso es mutuo: los hombres aprenden en la medida en que enseñan

Ante algún sentimiento o percepción lo mejor es buscar directamente la comunicación para aclarar la situación. Precisamente en ese proceso es que se genera la enseñanza mutua y, con toda seguridad, ambas partes habrán mejorado.