«Aquella chama terminó vomitando, casi nos vomitó a nosotros». «Me saludó y de repente comenzó a mostrarme la fotos que tenía en su blackberry, en las que aparecía desnuda en todas!» «De repente, lanzó las cajas por sobre la cabeza de todos los que estábamos en el vagón, y luego de que cerraron las puertas, pidió disculpas…». «…y me tenía agarrada por la vagina, mientras me veía con cara de circunstancia…». «… y sin saber la razón, comencé a llorar en apoyo a esa señora que lloraba desconsolada a mi lado…’.
Son muchos los cuentos de lo que sucede en un Metro, especialmente el de Caracas. A veces soy actor en los mismos, otras es lo que me cuentan. Unas veces cuentos cómicos, otras no tanto o nada, pero todos reflejan lo que acontece en los medios de transporte de esta convulsionada ciudad.
A partit de hoy iré publicando los que reciba, y espero que me remitan muchos más.