En estos días leía que «Venezuela se ha convertido en un campo de refugiados donde todos hacen cola para conseguir la comida». Eso me puso a pensar que realmente al menos en lo de las colas estamos como en un campo de refugiados. Pero un análisis más detallado me llevó por otras realidades.
En Wikipedia se encuentra el siguiente texto acerca de un campo de refugiados:
«Los campamentos de refugiados son generalmente establecidos de forma improvisada y diseñados para satisfacer las necesidades humanas básicas por sólo un corto periodo de tiempo. Algunos campamentos de refugiados son sucios y antihigiénicos. Si los refugiados no pueden regresar (a menudo por una guerra civil) puede ocurrir una crisis humanitaria.»
Venezuela se ha convertido, en los últimos 15 años, en un laboratorio de experimentos fracasados, todos producto de la improvisación de un gobierno que, a pesar de contar con un guión, sólo lo usa de pisapapeles y de acompañante de un Cristo más atormentado que nunca. Carreteras a medio construir, hospitales a medio andar, y viviendas construidas para sólo satisfacer las necesidades humanas básicas… Y ni siquiera eso!
La anarquía que inunda un campo de refugiados la vivimos los venezolanos: cuando llega un camión de harina pan, leche en polvo o líquida, aceite, mantequilla, harina de trigo, azúcar o hasta papel toalé salimos todos corriendo a hacer una cola para que con extremo maltrato y desidia nos vendan unas cantidades que no satisfacen las necesidades familiares. La inseguridad que pulula en los campos de refugiados es un juego de niños comparada con la que nos agobia en Venezuela, donde el gobierno, nada más de entradita, le rinde culto al caos al ni siquiera atreverse a ponerle orden a los motorizados, quienes cuentan en su haber con la menos el 50% de los delitos que se cometen, que van desde comerse una flecha en una calle o un semáforo, tumbarle el espejo retrovisor a un carro, hasta perseguir y robar a mano armada a quién va en su carro, y si opone resistencia, o tan sólo se asusta, lo mata. Con tan sólo amenazar que van a ir los motorizados en su nombre, el gobierno forajido que tenemos soluciona muchos de sus problemas.
En fin, que lamentablemente son muchas las coincidencias que existen entre la realidad venezolana y la de un campo de refugiados. Pero peor aún, me permití ir más lejos y ver en Wikipedia lo que indicaban que era un campo de concentración, y la semejanza con Venezuela es aún más trágica. El que no lo crea que verifique por sus propios medios…
«Un campo de concentración, o campo de internamiento, es un centro de detención o confinamiento donde se encierra a personas por su pertenencia a un colectivo genérico en lugar de por sus actos individuales, sin juicio previo ni garantías judiciales, aunque puede existir una cobertura legal integrada en un sistema de Represión política. Se suelen emplear campos de concentración para encerrar a opositores políticos, grupos étnicos o religiosos específicos, personas de una determinada orientación sexual, prisioneros de guerra, civiles habitantes de una región en conflicto, u otros colectivos.[1]
A diferencia de un campo de prisioneros, que se emplea como centro de detención de militares enemigos en un conflicto, un campo de concentración se usa mayoritariamente para la detención de personas no combatientes (aunque en algunos períodos históricos también se emplearon para encerrar a prisioneros de guerra). Son centros de detención conocidos públicamente, usualmente de gran extensión.»