Según Wikipedia, la planificación se refiere a las acciones llevadas a cabo para realizar planes y proyectos de diferente índole. En teoría, al hacer uso de la planificación, se minimiza la probabilidad de que se generen circunstancias que afecten el resultado previsto originalmente. Pero el problema se presenta cuando se planifica la realización de una actividad que resulta ser desconocida para el planificador.
Tener un hijo (o una hija, como es mi caso), es una bendición. Desde el momento que se conoce la noticia de que se va a ser papa, uno comienza a planificar, y trata de ir lo mas lejos posible, pero por supuesto, en se proceso de planificación, comienzan a pasarse por alto los detalles que resultan tan obvios, en ese momento, que no se consideran, hasta que se ve uno enfrentado a los mismos. Y uno de los problemas mas graves de los que puedo dar cuenta, es que quienes ya son padres, siempre proceden a dar detalles de los hechos mas negativos, pero que resultan ser los menos importantes o relevantes, como por ejemplo, que no se va a volver a dormir, que no se tendrá mas vida, y muchas cosas mas que, desde el punto de vista de alguien que no es padre aun, se hubiesen resuelto simplemente no teniendo un hijo (o hija), por lo cual uno termina hasta pensando que, por una parte, para que los tuvieron (será que los obligaron?), y por supuesto, aparte del terror y duda que le causan a uno, por otra parte uno comienza a ver solo el bosque, y no los árboles que lo componen. Pero resulta que en lugar de hablar solo en negativo del hecho de ser padre, es mucho mejor, aparte de mas practico para quienes escuchan los comentarios, que le hablen a uno de los detalles que uno nunca ve hasta el momento en que le tocan, para el cual no se ha planificado nada, y toca asumir la improvisación como mecanismo de defensa. Por ejemplo, nadie nos dijo lo que significaba ir a hacer mercado. Por lo general, utilizamos un “carrito” para bajar el mercado una vez que regresamos a la casa; en este caso, como nos toco ir a mi esposa y a mi con la bebe, tuvimos que llevar el coche, lo cual significo que no cabían el carrito y el coche, por lo cual nos llevamos solo el coche; En el supermercado, llevábamos a la bebe en su coche, que lo empujaba la mama, y yo llevaba el carrito del mercado, hasta un punto en el cual la bebe se fastidio, y hubo la necesidad de sacarla del coche y cargarla, por lo cual, quede yo encargado de empujar tanto el carro del supermercado, como el coche, todo bajo la mirada de lastima de todos los que me rodeaban, y mas enredado que un kilo de estopa, ya que o empujaba el carro y arrastraba el coche, o al contrario, pero que en cualquier caso terminaba chocando con los anaqueles, pisando los pies a quienes se me atravesaban, un desastre. Claro, luego de que comente la escena a un experto papa, me dijo “aaaahhh, pero es que si la llevas en el portabebe, la colocas en el mismo carro del supermercado…”. Excelente, como no me lo dijeron antes. Bueno, pero no termino allí la improvisación. Al salir del supermercado, la mama fue con el coche, mientras yo me adelantaba con el mercado, para meterlo. Al terminar y darle la propina al muchacho, quien por supuesto se volteo y se fue de inmediato, llego la mama y el coche, y entonces cai en cuenta que el coche iba en el sitio donde estaba uniformemente distribuido el mercado, por lo cual hube de acomodar las bolsas, de manera de dejar el espacio requerido para meter el coche, sucediendo que la única bolsa que se me paso de mover fue la de los huevos… Un nuevo aprendizaje, pues, que se debe colocar el mercado de manera tal que queda después el coche, en las oportunidades en que se deba llevar el mismo.
Son infinidad de detalles los que se pasan por alto, pero que se van aprendiendo en el camino. Pero lo mas importante, es que precisamente es la dicha de ser papa! Por ello le digo a todos los que están pensando en ser padres, que no hay manera de que les expliquen como va a ser el camino. Como dicen en Matrix: solo se puede enseñar el camino, mas no recorrerlo (o algo así). El dia a dia es el que va dando la pauta, y definitivamente, se podrán planificar algunas cosas, como es tener suficientes pañales, o leche, o teteros, o ropa, pero mi experiencia hasta ahora, es que no hay manera de saber cuantos pañales va a usar en un dia, cuantas onzas se va a tomar, a que hora se va a dormir, como lo va a hacer, ni nada. Solo la paciencia y el amor les darán las respuestas a todas las preguntas y dudas que van apareciendo. Y, por otro lado, no profundicen en las cosas negativas que siempre les van a decir sobre ser padres. Es una decisión que se toma, y como tal se debe asumir, y les puedo decir, que no hay absolutamente nada negativo ni malo de ver como, minuto a minuto, va creciendo un hijo (o hija), lo cual, obviamente, requiere mucha paciencia, pero es toda una aventura.
Nosotros planificamos todo, y pensamos que teníamos todo bajo control. QUE EQUIVOCADOS ESTABAMOS!!!! PERO QUE FELICES SOMOS IMPROVISANDO.