Primeros días del año. Comencé trabajando fuertemente en mi lista de libros por leer. Ya llevo 2 de los al menos 70 con los que me he comprometido. Y el otro gran compromiso es escribir… escribir ha sido siempre una combinación de placer con terror y anhelo. Aparte de lo que comparto, y siguiendo los consejos de muchos que lo recomiendan, desde mediados del año pasado dedico parte de cada uno de mis días a escribir en mi diario, y lo mejor es comenzar este año leyendo ese tesoro, el cual me inspira en muchas de las ideas que tengo hoy en día. Me libera realmente escribir para mi, sin guardarme nada, por lo cual lo recomiendo ampliamente. Y como parte de los compromisos conmigo mismo, se encuentra precisamente escribir en el blog (como ahora hago). EL año pasado no logré ser constante con este tema, de manera que es un punto a mejorar este año. Entre los proyectos que manejé en años anteriores, incluso tuve un podcast, el cual sigue estando en los planes a seguir siendo desarrollados pero no este año. Bueno, eso creo. Pero sí escribir, como lo anunciaba en la publicación anterior. Y la idea es publicar en el blog sin falta cada domingo como mínimo, de manera que hoy comienzo con la práctica.
Viendo la lista de ideas que tengo, siempre tiene un mayor peso lo anecdótico, pero también ha estado creciendo la inspiración con respecto a la experiencia en el campo profesional. Muchas veces parece increíble como uno piensa en acciones y/o soluciones que se muestran tan sencillas que se descartan, y al final terminan siendo la mejor opciòn que se pudo haber ejecutado, y esa confianza se va adquiriendo con el tiempo, luego de ser parte de tremendas equivocaciones que, sin lugar a dudas, van conformando el espectro de la experiencia. Y en lo que a mi respecta no hay nada mejor que compartir la experiencia que se va acumulando, siempre esperando que alguien se interese en ella… Y de lo que mas me gusta como proyecto este año, están lo que pienso que pueden ser unos libros. Esa experiencia de escribir lo que yo pienso que es un libro ha sido muy interesante, ya que, a diferencia de estos artículos independientes y en la mayorìa de las veces inconexos, necesito mantenerme dentro de una línea y trama. Muchas veces me he visto en la necesidad de escribir y, al leer, cambiar de posición, guardar para después o, simplemente, desechar. Pero lo mas duro es mantenerse constante en la escritura periódica. Y es que definitivamente el establecerse metas es fácil, lo difícil es mantenerse en el rumbo para alcanzar las mismas.
Este nuevo año ha iniciado de manera extraordinaria y, Dios mediante, así deberá transcurrir en el resto de su existencia. Dicen que los primeros 12 días del año definen cómo estará cada mes por venir, y en mi caso, hasta ahora, el año se presenta de forma espectacular. Como pasa para cada uno de los seres humanos que poblamos la tierra, está en mis manos hacer realidad cada uno de mis planes. Es inevitable que se presenten momentos difíciles, ya que la vida está plagada de ellos. Pero lo importante es tener la disposición de enfrentarlos con el mejor ánimo y salir siempre adelante.
Y, como ya agarré inspiración y fuerzas, me voy a seguir creando hojas en mis proyectos de libro…